viernes, 18 de diciembre de 2015

EL DEBER DE LA MEMORIA: IVÁN DAVID ORTIZ PALACIOS. Por: JERITZA MERCHAN DIAZ

Escribir sobre Iván David Ortiz Palacios, me cuesta bastante, primero porque la turbación y el dolor no solamente me opacan los ojos, sino también las ideas, el corazón y el alma, sin embargo, considero que la elocuencia en estos momentos es lo de menos, lo realmente importante es tratar de forma sentida, comprometida, pero sobre todo razonanada, hacer una presentación del ser humano que muchas y muchos tuvimos la fortuna y el honor de amar, admirar y gozar. Por las circunstancias de la vida y de la propia historia cada uno y cada una de quienes pudimos disfrutar de su carcajada vital, su fraternidad continua, su ternura perenne, su valiosa inteligencia, su consecuencia sin tacha y su bella condición humana tendremos mucho que decir, bastante que evocar y coincidiremos en que estamos fluctuando entre la nostalgia del vacío enorme que ha dejado en nuestras vidas, pero al mismo tiempo en el lleno de su existencia.

Para algunos Iván David Ortiz Palacios, será ese compañero cariñoso, solidario, alegre que siempre estaba ahí quizá sin la palabra precisa, pero con el abrazo necesario para asistir en los dolores, en las alegrías, en los alientos y desalientos, en las condolencias o felicitaciones, en las risas y en los llantos que nos impone la vida; para otros será el asesor de trabajadores, campesinos, desplazados, indígenas que además de la opinión y el análisis jurídico proporcionaba el aliento, la esperanza, el optimismo y el compromiso abierto por sus causas; otros están extrañando al profe amable, cortés, devoto, dinámico, comprensivo que no solo se preocupó por dictar sus clases, sino por concientizar a sus estudiantes de la necesidad de prepararse, de saber, de ser profesionales, pero sobre todo de reconocerse como sujetos sociales que hacen y son parte de un contexto que no solo requiere de sabios especialistas sino de seres humanos pensantes y éticos, transformadores y protagonistas de su propia historia social, política y sobre todo vital; hay quienes por supuesto se conduelen de haber perdido a quien fuera su líder sindical, su representante profesoral, su director de departamento, su director de consultorio jurídico y centro de conciliación, su director y colaborador de publicaciones seriadas; otros se resisten a creer que el miembro de la Asociación de Abogados Laboralistas, el miembro del equipo jurídico de la CUT, el interventor de proyectos en materia de derechos humanos, los haya dejado acéfalos en el pronunciamiento constante sobre leyes, tendencias, posiciones políticas y los señalamientos de las falencias de un Estado que se funda en las inconsistencias de sus sistemas y sus estructuras con la finalidad de sostenerse democrático en el papel, pero autoritario y excluyente en la realidad.

Iván David Ortiz Palacios, también los grupos de investigación Genocidio Político contra la Unión Patriótica y Sindicalismo derecho laboral se han quedado huérfanos de ideas, proyectos, fases investigativas; la recuperación de memoria y de dignidad de las víctimas se ve lesionada, la historia de la lucha de los trabajadores por conquistar y defender sus derechos queda en espera, doliéndose de la partida prematura e inconcebible de su comprometido investigador. Las compañeras y compañeros con quien trabajó en las Universidades: Nacional de Colombia, Autónoma de Colombia, INCCA, Central, Jorge Tadeo Lozano ya no escucharan: maestro como ha estado, y que más doctora, quiero rendirles mis honores para tan alta dignidad y gobierno; los compañeros de su glorioso Partido Comunista no volverán a oír el “aquí estoy cumpliendo la tarea, cual es la orientación, contra quien es el enfrentamiento; quienes se cruzaron con sus existencia y su calidez mientras trabajó en la Defensoría, en la Presidencia y Vicepresidencia de la República, en el Ministerio de Salud, pero también quienes en la UNEB, SINTRAHOSCLISAS, SINTRAUNICOL, SINTRAUNINCCA, ASPU, TELEFENOS, TELECOM, LORENCITA VILLEGAS DE SANTOS, HOSPITAL SAN JUAN DE DIOS, ANTHOC, SINPROFUAC (donde fue presidente) y otros muchos sindicatos de industria y de base, así como tantas asociaciones y trabajadoras y trabajadores no sindicalizados que lo escucharon (a éstos siempre les repetía hagan el sindicato), se regocijaron con su ironía inteligente, su irreverencia sustentada, se complacieron de su inteligencia y se admiraron de su sencillez y humildad, lo están echando de menos.

La muchachada, como se refería afectuosamente a la juventud que lo rodeaba, ya fueran estudiantes, monitoras y monitores, auxiliares de investigación, pasantes, monógrafos, profesores en formación, líderes sindicales y sociales jóvenes, muy seguramente están extrañando sus indicaciones, sus posturas analíticas, sus exigencias de trabajo, pero también su arrojo para enfrentarse a lo que no consideraba justo, equitativo, legal, pero sobre todo ético. Los marchantes de manifestaciones, marchas, caminatas, en defensa a la vida, lo público, la justicia, la verdad, la reparación, los derechos humanos, la universidad pública; los compañeros, camaradas y amigos, hombres y mujeres lo echaran de menos en la fiesta que hacía del Primero de Mayo, ya no recorrerá la marchas dos veces empezando de adelante hacia atrás y viceversa, caminando un poquito con: sus sindicatos, sus universidades, sus asociaciones, su partido, sus agremiaciones, sus amigas y sus amigos, porque él se sentía de todos, era de todos. Seguir mencionando es seguir muy seguramente abriendo susceptibilidades, él mismo lo decía cuando preparaba sus discursos o presentaciones, siempre se quedan personas indispensables que mencionar, con toda certeza el hacer reconocimientos conlleva a inevitables y dolorosos olvidos de palabra, porque en la acción y en el afecto ahí están todos los que han permitido o contribuido a que la vida de uno sea ésta.

Con esa misma certeza sé que cada una de las personas con la que se encontró en el camino, tendrán una historia que contar sobre él, una historia académica, sindical, política, fraternal, amorosa, y una no necesariamente excluye a las demás, porque como hombre integral, integro e integrador aunque las especificidades y los detalles marquen momentos, espacios, entornos y contextos concretos, la generalidad de su compromiso, ternura, bondad, humildad y consecuencia cruza toda su existencia y por ende todo su pensamiento y acción. Muestra fehaciente de ello, es el cariño, el respeto y el afecto que siempre manifestó y le han manifestado estudiantes, profesores, colegas, “conmilitones” y también muchos disidentes, obreros, campesinos, población desplazada, indígenas a quienes le replicaba sus convicciones sociales, intelectuales, políticas y afectivas; con quienes soñaba, inventaba y transformaba; con quienes igual compartía una discusión acalorada por ideas encontradas, lo mismo que un fuerte abrazo, un baile, un chiste, un tinto; pero también con los que compartía su formación intelectual para dar una opinión, sustentar un criterio, criticar una acción, y es que durante buena parte de su vida se preocupó por cultivarse académicamente lo que lo llevó a ser: Magíster en Investigación Interdisciplinaria en Ciencias Sociales de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas; especialista en Pedagogía Constitucional de la Universidad Autónoma de Colombia; Licenciado en Ciencias Sociales de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas; Especialista en Derecho Público de la Universidad Nacional de Colombia; especialista en Derechos Humanos de la Escuela Superior de Administración Pública; especialista en Derecho Laboral de la Universidad Nacional de Colombia; Graduado en Derecho de la Universidad Nacional de Colombia; terminar el plan de estudios de la maestría en Historia Universidad Nacional de Colombia, llevaba doce años perfilando su trabajo de grado, pues a pesar de su bagaje investigativo en la temática escogida, aún consideraba que la pregunta no estaba bien construida. Para el primer semestre de este año comenzaría a adelantar estudios de maestría en el programa de escrituras creativas de la Universidad Nacional de Colombia, porque estaba empeñado en aprender a escribir con el ánimo de elaborar un cuento largo de la historia de la Unión Patriótica: así podré tener mar cercanía con fuente directa oral, sin abrir falsas expectativas a la víctimas.


En materia de derechos humanos realizó dos cursos de actualización en la American University, Waschington Collage of Law, center for Human Rights and Humanitarian Law en EEUU y se desempeñó como asesor en divulgación y pedagogía de la Presidencia de la República; en dos oportunidades fue sido entrenador del equipo de estudiantes de la Universidad Nacional de Colombia al concurso organizado American University, Waschington Collage of Law, center for Human Rights and Humanitarian Law ; en la investigación bajo el convenio existente entre la Universidad Nacional de Colombia, la Universidad de los Andes y la American University participó como coordinador de la primera; participó en calidad de juez en dos cursos nacionales de Derechos Humanos auspiciados por MSD, al igual que fue dos veces entrenador del equipo de la Universidad Nacional de Colombia en el III y IV Concurso Nacional Universitario de derechos Humanos (ocupando el primer lugar) . En 2006 fue entrenador del mismo equipo en Costa Rica para la Competencia Interamericana de Derechos Humanos “Eduardo Jiménez de Aréchaga” (ocupando el primer lugar).


Desde 1997 fue investigador de la Unidad de Investigaciones Jurídico Sociales Gerardo Molina de la Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional de Colombia desde donde lidero los dos grupos de investigación ya mencionados y que hoy buscan afanosamente director para seguir adelantando la tarea. A la par estas labores docentes durante más de veinte años se desempeñó como asesor en el mundo laboral, entre otros, en la CUT, Consultor de la OIT, Presidente Asociación de Abogados Laboralistas al Servicio de los Trabajadores, Consultor de MSD / USAID taller nacional con las organizaciones sociales sobre los mecanismos internacionales de protección de los D.H. Hasta el fatídico 17 de diciembre de 2008 era profesor asociado de la Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional de Colombia, también docente de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Colombia, en esta actividad dictó entre otras, las cátedras de Sindicalismo como Movimiento Social, Derecho Internacional Humanitario, Sistema Interamericano de Protección de Derechos Humanos, Historia político-económica de Colombia, Cátedra Jaime Pardo Leal, Derecho laboral colectivo, Derechos Fundamentales y Humanos, Derecho laboral individual, Monografía I, Derecho Internacional Público; en los programas de postgrado dictó derecho Laboral Internacional, la Seguridad Social en los Sistemas OIT e Interamericano, Teorías Contemporáneas del Estado, Trabajo de Grado, Derecho procesal laboral- tendencias actuales del derecho laboral, Problemas colombianos I, delincuencia y situación social en Colombia, Derechos Humanos (especialización en antropología forense).

Sus observaciones como profesor, sus vivencias como sindicalista y consultor, sus expectativas como académico le permitieron reflexionar acerca de varios temas que compartió con todos a través de diversas publicaciones, entre otras:

  1. Marx Vive. “Genocidio político contra la Unión Patriótica: eliminación y resistencia electoral”. En: Izquierda y socialismo en América Latina. Jairo Estrada Compilador. Stilo impresores, Bogotá, 2008.
  2. Jaime Pardo Leal Patriota de la unidad. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Dirección Nacional de Divulgación, ISBN 978-958-701-918-6, Unibiblos, Bogotá, 2008.
  3. Memoria Narrada, Narración de una historia. El genocidio político contra la Unión Patriótica. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Dirección Nacional de Divulgación, ISBN 978-919-055-7, National Graphics Ltda., Bogotá, 2008.
  4. Un cuento por encargo”. En: Historias paralelas, “Bogotá, un libro abierto”, realizada por la Secretaría Distrital de Cultura Recreación y Deporte de Bogotá –SDCRD- en el año 2007, en el marco de la nominación de Bogotá como “Capital Mundial del libro”
  5. Genocidio político contra la Unión Patriótica Visto por la prensa escrita 1984-2004 , Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Dirección Nacional de Divulgación, ISBN 958-701-635-6, National Graphics Ltda., Bogotá, 2007.
  6. Recuperando la memoria: Conmemoración de los 15 años del Centro de Conciliación Jaime Pardo Leal, Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, ISBN 958-701-674-2, National Graphics Ltda., Bogotá, 2006.
  7. Narración Breve para una historia larga- Sebastián González- Upeista sobreviviente-, Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, ISBN 958-701-716-1, National Graphics Ltda., Bogotá, 2006.
  8. Genocidio político contra la Unión Patriótica. Nuevas miradas para nuevas lecturas, Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, ISBN 958-701-717-x, National Graphics Ltda., Bogotá, 2006.
  9. La resistencia al olvido. La prolongación de la existencia a pesar del genocidio político contra la Unión Patriótica, Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, UNIJUS, ISBN 978-958-17-0193-3, Multi-impresos Ltda. Bogotá, 2006.
  10. La protección laboral en el Sistema interamericano de Derechos Humanos, Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales UNIJUS, ISBN 978-958-17-0197-1, Multi-impresos Ltda. Bogotá, 2006.
  11. Derribando los Obstáculos al Derecho Laboral (coautor). En: El derecho Laboral en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos _Editor Marcel Silva Romero, Confederación Sueca de Empleados Profesionales, Unión general de Trabajadores de Suecia, Central Unitaria de Trabajadores CUT- Colombia, ISBN 958-8201-97-7, Ed. Nueva Semilla, Bogotá, 2006
  12. Marx. Vive. Teoría y acción política en el capitalismo (coautor) La Uribe un escenario de acuerdo: el proceso de paz de 1984 –Dos décadas de enseñanza sobre la importancia de no olvidar la historia - Editor Jairo Estrada Álvarez, Universidad Nacional de Colombia-Sede Bogotá, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Departamento de Ciencia Política, Unibiblos, ISBN 958-701-623-8 Bogotá, 2006 (hubo ponencia en seminario internacional)
  13. Intelectuales, tecnócratas y reformas neoliberales en América Latina (coautor) Elites jurídicas, justicia laboral y política neoliberal, Editor Jairo Estrada Álvarez, Universidad Nacional de Colombia-Sede Bogotá, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Departamento de Ciencia Política, Unibiblos, ISBN 958-701-573-8 Bogotá, 2005. (hubo ponencia en seminario internacional)
  14. Panorama sindical colombiano, UNIJUS, Investigaciones en construcción, Serie 11, 2005
  15. El derecho de negociación colectiva de los empleados públicos, UNIJUS, Investigaciones en construcción, Serie 12, 2005
  16. La enseñanza del derecho laboral en Colombia. En: Conocimiento y pedagogía (coautor), Compilación, SINPRIFUAC, Alternativa gráfica Ltda., ISBN-958-33-6194-1 Bogotá, 2004.

  1. Rebelión desde la región. Movimiento Popular “Los Inconformes” de Nariño 1980-1990 (prólogo) Autor Mario Velasco Rodríguez. Empresa Editora de Nariño-Gobernación de Nariño, Pasto, 2004.
  2. Homenaje de la CUT a los abogados laboralistas de Colombia. (coautor). Sistema de Derechos Humanos y la protección de los derechos laborales. Compilador Marcel Silva Romero. CUT, edición suministros y ediciones Ltda., Bogotá, 2004 (hubo ponencia)
  3. La cuestión sindical, Conocimiento & Humanismo, Ed., Universidad Nacional de Colombia, Unibiblos, ISBN-958-701-359-X , Bogotá, 2004.
  4. Sistema de alertas tempranas: Un aviso para preocuparse. Remembranzas y anecdotario. En: El Plan Colombia y la Intensificación de la guerra. Aspectos globales y locales. Compilador Jairo Estrada. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Laboratorio Político, Unibiblos, ISBN 958-701-233- X, Bogotá 2002 (hubo ponencia seminario internacional)
  5. Opositores, guerrilleros, terroristas. En: Marx Vive. (Coautor). Compilador Jairo Estrada. Universidad Nacional de Colombia, Unibiblos, ISBN 958-701-287-9, Bogotá 2002. (hubo ponencia seminario internacional)
  6. La vida es para vivirla, para vibrarla, para sentirla. Apuntes para la recuperación de la memoria de Jaime Pardo Leal, (prólogo). En: Escritos jurídico Políticos del maestro Jaime Pardo Leal. Colección Maestros de Sede Universidad Nacional de Colombia, ISBN, 958-701-222-4, Bogotá, 2002.
  7. Jaime Pardo leal un pensamiento vigente. En: La clase obrera ante el derecho social Universidad Nacional de Colombia, Unibiblos, ISBN 958-701-225-9, Bogotá 2002.
  8. Taller de actualización y capacitación sistema general de riesgos profesionales, (coautor), Reconceptualización del derecho a la salud, publicación del Ministerio de Salud, SGRP Y Asociación de Abogados Laboralistas de Trabajadores, Factoría Gráfica, Bogotá, 2002. (hubo ponencia)
  9. La salud en medio de la guerra. En: Taller de actualización y capacitación sistema general de riesgos profesionales, publicación del Ministerio de Salud, SGRP y Asociación de Abogados Laboralistas de Trabajadores, Factoría Gráfica, Bogotá, 2002.
  10. El Sistema de alertas tempranas como mecanismos de guerra. En: Plan Colombia. Ensayos Críticos. Compilador Jairo Estrada. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Laboratorio Político, Unibiblos, ISBN 958-701-041-8, Bogotá 2001(hubo ponencia seminario internacional)
  11. Vida y muerte del sujeto histórico. El genocidio político contra la U.P. En: Marx Vive. Compilador Jairo Estrada. Universidad Nacional de Colombia, Unibiblos, ISBN 958-701-264- X, Bogotá 2000 (hubo ponencia seminario internacional)
  12. Renacer la esperanza, Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Bogotá, 1999
  13. Genocidio Político contra la Unión Patriótica, Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Bogotá, 1999
  14. Universidad Derecho y Sociedad. En: Jornadas Nacionales de profesores de consultorios jurídicos. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Bogotá, 1999

  1. ¿La salud cuál derecho?. En: La salud desde la Universidad, Universidad Nacional de Colombia, 1999.
  2. El derecho laboral que hereda el milenio. En: Pedagogía y Contexto. Compilador Marcel Silva Romero. Universidad Nacional de Colombia, Unibiblos, Bogotá 1999
  3. Universidad, actualidad y siglo XXI (coautor), La autonomía universitaria, Compilador Jorge Cárdenas Galvis, Alternativa gráfica Ltda., Bogotá, 1998.
  4. Los procesos de integración económica regional y su incidencia en el mundo del trabajo, En: La enseñanza del derecho laboral hoy, retos y perspectivas. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Bogotá, 1995


Como colaborador de publicaciones periódicas, hizo reflexiones acerca de:

  1. Hablan las sobrevivientes del genocidio contra la Unión Patriótica. En: Taller Nº 21, septiembre, 1692-6978, Bogotá, 2008.
  2. Veinte años del genocidio contra la Unión Patriótica. En: Taller No.9, abril-junio, ISSN 1692-6978, Bogotá, 2004.
  3. Veinte años del Acuerdo de La Uribe: 20 referentes para recordar y un modelo de negociación para no olvidar. En: Taller No.11, octubre-diciembre, ISSN 1692-6978, Bogotá, 2004.
  4. La Vigencia del sindicalismo colombiano: Los retos frente a los obstáculos. En: Taller No.7, noviembre 2003-enero 2004, ISSN 1692-6978, Bogotá, 2004
  5. In memoriam del Maestro Jaime Pardo Leal. En: Pensamiento Jurídico. U.N. Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, N° 15, ISSN 0122-1108, Bogotá, 2002
  6. Jaime Pardo Leal un hombre epónimo, impoluto, preclaro y catedralicio. En: Trabajo y Derecho N° 38 – 2002.
  7. ¿Cuál crisis del movimiento sindical?. En: Trabajo y Derecho N° 37, ISSN 0120-4718, Bogotá, 2001.
  8. Criminalización de la protesta obrera. En: Trabajo y Derecho N° 36, ISSN 0120-4718, Bogotá, 2001.
  9. La desaparición forzada, una conducta de perpetración del genocidio político contra la Unión Patriótica. En: Pensamiento Jurídico. Economía y Derecho, Revista de teoría y derecho N° 14, ISNN 0122-1108, 2001.
  10. Los consultorios jurídicos colombianos. En: Contorno judicial, revista jurídica N° 4 enero-marzo, SIN 0124-5414, 2000.
  11. Objeción a la objeción sobre la tipificación del genocidio. En: Contorno judicial, revista jurídica N° 4 enero-marzo, SIN 0124-5414, 2000.
  12. Notas preliminares para la contemplación de un delito -El Genocidio-. En: Revista jurídica U.N. N° 1- 1999.
  13. Aspectos constitucionales y legales en la jurisprudencia sobre indexación. En: Pensamiento Jurídico. Economía y Derecho, Revista de teoría y derecho. N° 10, ISSN 0122-1108, 1998.
  14. Estado capitalista y discurso. En: Conocimiento y Humanismo No 3 Santafé de Bogotá, 1997.
  15. Noche y niebla. En: Conocimiento y Humanismo No 2 Santafé de Bogotá, 1997

  16. La reestructuración capitalista. En: Conocimiento y Humanismo No 1 Santafé de Bogotá, 1997.
  17. Neutralidad y conflicto armado. En: Izquierda No. 37 Santafé de Bogotá, 1997.
  18. Notas preliminares para la lectura de una nueva fase de acumulación. En: Taller, Revista teórica de convergencia, N° 6, 1996.
  19. La universidad y la acción sindical. En: Horizontes IX-X 1995-1996 ISSN 0121-2265, año VIII.
  20. La Contrarreforma. En: Izquierda No. 36 Santafé de Bogotá, 1996.

  21. Rituales y mitos de una crisis. En: Izquierda No. 35 Santafé de Bogotá, 1996.
  22. Crisis, reconstrucción o cambio. En: Izquierda No.34 Santafé de Bogotá, 1995.

  23. Cuatro años de mesianismo constitucional. En: Izquierda No.33 Santafé de Bogotá, 1995
  24. La política laboral del Estado. En: Izquierda No. 32. Santafé de Bogotá, 1995.
  25. Notas preliminares para una especulación sobre el caso del M-19. En: Taller, Revista teórica de convergencia, N° 5, 1995.
  26. La O.I.T y la Constitución de 1991. En: Trabajo y Derecho, N° 29, ISSN 0120-4718, 1994.
  27. Derechos Humanos y derecho del trabajo. En: Trabajo y Derecho No. 28, ISSN 0120-4718, Santafé de Bogotá, 1994.
  28. Enseñando a usar los cubiertos sin ofrecer la comida. En: Científica Horizontes VII-VIII, Santafé de Bogotá, 1994.
  29. Notas sobre Protocolo II de Ginebra. En: Izquierda No.29 Santafé de Bogotá, 1994
  30. El acuerdo humanitario. En: Izquierda No.30 Santafé de Bogotá, 1994.
  31. Del pacto social y otros demonios. En: Izquierda No.28 Santafé de Bogotá, 1994
  32. La desaparición forzada en Colombia. En: Izquierda No.27 Santafé de Bogotá, 1994
  33. La Huelga una alternativa vigente. En: Izquierda No.26 Santafé de Bogotá, 1994
  34. Colombia y la O.I.T. 75 años de violaciones. En: Izquierda No.24 Santafé de Bogotá, 1994.
  35. Participación directa de los sindicatos en las elecciones. En: Izquierda No.22 Santafé de Bogotá, 1994.
  36. La seguridad social en Colombia, hoy. En: Trabajo y Derecho, N° 27, ISSN 0120-4718, Santafé de Bogotá, 1993.
  37. Silencios de la reforma de la seguridad social. En: Izquierda No. 20 Santafé de Bogotá, 1993.
  38. Estrategia violenta de valorización del capital. En: Izquierda No.14. Santafé de Bogotá, 1993.
  39. El Salvador, crímenes e impunidad: un ejemplo para Colombia. En: Izquierda No.12 Santafé de Bogotá, 1993.
  40. Dinosaurios soñadores de utopías. En: Izquierda No.11 Santafé de Bogotá, 1993.
  41. Vosotros haced la Constitución que yo haré los reglamento. En: Izquierda No 9 Santafé de Bogotá, 1993.
  42. La reforma de la seguridad social...o la pensión del coronel. En: Izquierda 6. Santafé de Bogotá, 1992.
  43. Privatización de lo público en Colombia. En: Izquierda No.2. Santafé de Bogotá, 1992
  44. La Constitución y los trabajadores. En: Taller No.6, Santafé de Bogotá, 1992.
  45. Crisis, reinserción y legitimación. En: Revista, Taller No.5, Bogotá, 1991.
  46. La descentralización y los derechos de los trabajadores. En: Criterio No.14, Bogotá, 1990.
  47. El carné de orden público en Urabá. En: Sindicatos No. 6, Bogotá, 1988.


Próximamente y como siempre con el apoyo de su amada y respetada Universidad Nacional de Colombia a través de la Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, la Unidad de Investigaciones UNIJUS y la Dirección Nacional de Divulgación se podrán conocer otras tres publicaciones que con su partida quedaron en proceso de impresión.

-[efectivamente se conocieron, gracias a la colaboración de muchas y muchos amigos, especialmente de su MEJOR amigo, luego de su partida “El Jorge”: Jorge Ignacio Salcedo Galán quien no solo estuvo ahí para que sus libros salieran, sino quien ha asumido el no dejar morir el trabajo de dignidad y resistencia por la recuperación de la memoria de la UP. Con todo lo que ello ha acarreado, a Sebastián, Jaime Araujo y a otr@s que siguiendo su legado no solo han enfrentado los embates de un Estado propiciador del genocidio, sino la intransigencia y el olvido de quienes no quieren asumir su propia historia. Gracias infinitas a la muchachada que desde 2011 se ha constituido en UP de Base, también se ha propuesto recuperar su obra, no solo en lo dicho, sino sobre todo en lo hecho.] -

Su labor docente e investigativa lo hizo merecedor en la Universidad Nacional de Colombia de las distinciones en: Reconocimiento de mejor proyecto de extensión solidaria como director del Consultorio Jurídico 1998; Docencia meritoria en reconocimiento al destacado desempeño docente 2004; Investigación meritoria en 2008.

En concordancia con lo que dice Gabriel García Márquez sobre las vidas que tiene un hombre, este es el Iván David Ortiz Palacios de vida pública; en su esfera privada de la cual siempre fue muy celoso, su belleza como ser humano no dista en nada de las cualidades manifiestas con todos los que lo conocieron, amoroso como nadie, excelente hijo, padre, hermano, tío, cuñado, compañero; motor de afecto, confianza, comprensión, complicidad, alegría y solidaridad; la disposición de escuchar y observar, pero sobre todo de amar le permitió que tuviera la precisión y el conocimiento de cada uno de los miembros de su núcleo e igual que en su vida pública asumió su inigualable condición de abogado para orientar, discutir, aconsejar, dirimir, impulsar, optimizar, esperanzar, compartir, pero de ningún modo pudo asumir el rol de juez, pues nunca supo juzgar y muchísimo menos condenar a ninguno y a nada, por su amor incondicional para todos y para cada uno. Hoy [ siete años después] al intentar evocarlo me encuentro con el retrato de un hombre grande, valioso, enamorado, enamoradizo y enamorante, que se reía de la vida, pero la tomaba tan en serio como pocos, un hombre con la calidez de la primavera, con la alegría de los niños, con la sabiduría de los ancianos, un hombre que amó y permitió que lo amaran, un hombre que jamás se repetirá porque es único. Tenía una cabeza llena de ideas, de proyectos, de razones y sin razones, bien delineada por contornos éticos y humanos; una cara feliz que se alegraba constantemente por lo sueños y esperanzas, pero que se enternecía por los resultados de esa condición humana que igual que a veces permite que broten seres muy bonitos, también descubre la fealdad de la especie, él tan dulce, hombre de afectos se endurecía ante la injusticia, ante la ignominia y la desfachatez. Su retrato nos evoca ahora un pecho amplio que necesitaba como estuche para un corazón extremadamente grande; una espalda fuerte para cargar y soportar tantas peleas que dio y consideraba necesarias para seguir viviendo; uno brazos largos y fuertes pues con ellos rodeaba a muchas personas para protegerlas y abrazarlas en torno a lo bello, tan bien para sosegarlas en torno a lo adverso; unas manos finas y delicadas que sabían acariciar, lo más suave y lo más áspero con lo que se encontrara para moldearlo y hacerlo agradable; unas piernas hermosas que sabían donde pararse y hacia donde caminar; uno pies que sabían transitar muchos senderos pero que jamás se alejaron del camino que se trazó desde niño, el de la confianza, entereza, la lucha, el compromiso, ese mismo en que no importaba la etapa que estuviera transitando, siempre la meta era la vida.

Es punzante para mis sentidos, pero sobre todo para mi corazón seguir pincelando los trazos de un ser hermoso que ya no está aquí juntito, pero que sigue irradiando tantas formas y colores; ojala podamos recuperarnos y lograr hacer el dibujo nítido de Ivancito, en el pensamiento, en la acción, en la vida. Solo me queda [seguir extendiendo la] invitación a todos los que lo amamos, compartimos y aprendimos de él para que combinemos los matices y hagamos una gran obra, de ese hombre a quien le encantaba la poesía y lloraba leyéndola, le encantaba la literatura y la disfrutaba interpretándola, a quien lo conmovía la historia y se adentraba investigándola, a quien le inquietaba la justicia y se peleaba por materializarla, quien desconfiaba del derecho que existe y por eso quería construirlo con los trabajadores, los estudiantes, los campesinos, los indígenas, los negros, los pueblos Rom, las víctimas de vejámenes de lesa humanidad, de crímenes internacionales; las víctimas de esa guerra en la que nació y en la que se fue. Nunca permaneció ajeno a esa realidad por eso en diversos escenarios y desde distintas miradas habló de muchas cosas que en este país incomodan, porque quiso visibilizar partes de una realidad que se quiere tapar no con un dedo sino con mafia y crimen, pretendió mostrar la inconsistencia de una constitución democrática y la acción de un terrorismo de Estado, intentó enseñar que los padres de esta patria han fundamentado su descendencia de poder en la sangre de miles de colombianos, desafió la amnesia complaciente trayendo a la memoria los sucesos que enrostran las mentiras de la clase política. Porque para él la responsabilidad de un colombiano, ora desde su oficio, ora desde su formación, ora desde su sentido social tenía que ser comprometido con la historia individual, pero interpretada desde lo colectivo, por eso no se amilanó jamás cuando le decían que sus investigaciones no lo eran tanto, sino el resultado de una militancia, pues claro que es de militancia, la academia debe ser militante con la dignidad de la sociedad que espera de ella la voz de la conciencia, el conocimiento tiene que ser militante de la equidad humana, la investigación tiene que ser comprometida, o si no, mejor nos ponemos a jugar lotería hasta que ganemos y solucionada la supervivencia, nos olvidamos de existir.

De su vida íntima, no puedo decir nada, pues es de él y está con él, siquiera intentar hacerlo sería más que una deslealtad una profanación imperdonable; lo único que puedo manifestar al respecto es que desde lo más profundo de su ser irradiaba lo bonito y equilibrado de un ser que semejaba a los estuches perfectos para la hermosa bailarina, no era sino tocarlo y se abría de forma sencilla y delicada, no era sino disponerse a escucharlo para que los oídos comenzaran a deleitarse con preciosas melodías. Su grandeza perpetua nos queda en el recuerdo de verlo con sus manos sobre su pecho que le imprimen esa paz que suelen tener los monjes tibetanos cuando alcanzan el esplendor de la felicidad, sus ojos cerrados no son más que la señal del transe espiritual que solo pueden lograr los chamanes en máximo estado de elevación cosmogónica, su reposo completo solo puede interpretase como el momento maravilloso en que Remedios la Bella se eleva al cielo; entonces sería un sacrilegio arrebatarle al universo una imagen tan perfecta, que ha estado y seguirá estando como una obra maestra, para que toda aquella y todo aquel que quisiera encantarse y complacerse con sus existencia lo hiciera y lo haga, pero bajo la condición de no apropiarse, porque tal como la luna, las estrellas y el sol, él ha brillado para todos, pero lo que irradia no permitió, permite, ni permitirá que se agote en ninguno.


Ahora, en cada recuerdo, en cada vivencia, en los lugares en que no lo hallo, en los abrazos que ya no tengo, en la ausencia de esos bellos ojos que sabían sonreír siempre, solo me queda parafrasear la Elegía de Miguel Hernández, para intentar expresar, lo que ha sido y será por siempre Ivancito para mi, ese: compañero del alma, compañero. De alma de rosas; con el que tenía que hablar de muchas cosas y por eso lo quiero y lo requiero.